LA LEYENDA DE DON JUAN MANUEL

 LA LEYENDA DE DON JUAN MANUEL

Cuenta la leyenda que Don Juan Manuel era un caballero español que estaba casado con una hermosa mujer llamada Marina. Este caballero inspiraba miedo y respeto en muchos enemigos que se había ganado a lo largo de los años por su inteligencia y por la belleza de su esposa.

Con el paso de los años en los que Don Juan Manuel estuvo casado sentía cada vez más celos de los demás hombres de la ciudad, quienes admiraban profundamente la belleza de su mujer. Un buen día el matrimonio decidió tener hijos pero descubrieron que el caballero español no podría procrear.

Apesadumbrado e invadido por un terrible dolor, Don Juan Manuel se retiró durante un tiempo al Convento de San Francisco para encontrar un consuelo para su pena. Fue en ese momento que decidió traer a México a su sobrino, quien vivía en España, para que se hiciera cargo de sus negocios.

En ese mismo período, sus enemigos idearon un plan para acabar con él, que consistió en difundir el rumor que Marina había engañado a Don Juan Manuel con otro hombre. Al enterarse de la noticia, Juan Manuel invocó al Diablo, ciego de ira, ofreciéndole su alma a cambio de la identidad del hombre que había yacido con su mujer.

El diablo le dijo el nombre y le obligó a salir a matarlo a las 11 de la noche, pero después de hacerlo volvió a parecérsele y le confesó que ese no era realmente el hombre que había estado con su mujer. Acto seguido, el diablo le ordenó que siguiera matando hasta que él se apareciera junto al cadáver del culpable.

Al cabo de unos días, Don Juan Manuel recibió una visita en su mansión por la mañana, que le informó de que su sobrino había sido apuñalado la noche anterior a las 11 en punto. Al darse cuenta de lo que había hecho y totalmente destrozado, regresó al convento para hablar con un monje.

El monje le pidió que rezara en la horca durante 3 noches seguidas para exculpar sus pecados. Sin embargo, al tercer día encontraron al mismo Don Juan Manuel colgado en la horca.  

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